Irapuato, Gto.(30/07/2024).-La Coordinación de Prevención, Atención y Protección Animal (CANI) de Irapuato se ha constituido como uno de los principales obstáculos en el proceso de adopción y recuperación de los perros que son capturados en la vía pública, acusó el animalista y rescatista local, Williams Perales.
“Nosotros mismos lo hemos vivido cuando hemos querido rescatar a uno o dos cachorros que han sido trasladados al Cani, nos piden documentos y el cumplimiento de una serie de requisitos para recuperar un animalito que, al paso de los días, habrá de ser sacrificado si no logramos rescatarlo”, detalló el activista.
Aclaró que ese no es el único problema que existe en el Cani, “allí nunca está su director, el personal, y principalmente los captores, son personas prepotentes, groseras y abusivas, insensibles en el trato con los animales y con las personas”.
Narró que “en una ocasión me tocó acompañar al responsable de un peludo que había sido capturado ya que no se lo querían regresar porque el perrito había mordido al capturador, cuando el perro estaba totalmente chimuelo”.
Aseguró que en muchas de las ocasiones, los responsables de las mascotas acuden al Cani, pero cuando se enteran de los requisitos para la recuperación del animalito y de que tienen que cubrir una multa, optan por dejarlo en el lugar.
Consideró que para que el centro cumpla realmente con el objetivo de contribuir en la construcción de una auténtica responsabilidad social en el trato hacia los animales, tendría que darse cambios inmediatos al interior del Cani y contratar servidores comprometidos con el tema y no que su quehacer esté enfocado en retirar de las calles a los animales para llevarlos a un centro de sacrificio.