Salamanca, Gto. (19/3/2025).- Entre porras, gritos, cantos y globos blancos, fueron llevados los cuerpos de los 8 jóvenes asesinados en la Comunidad de San José de Mendoza, al salón Chalico, donde el Obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, ofició una misa de exequias.
Durante la ceremonia, el obispo hizo un llamado a elevar oraciones por aquellos que eligen el camino del mal, subrayando la preocupación por los jóvenes que han caído en redes de violencia y criminalidad.
«Es momento de pedir por su conversión y un cambio de vida», expresó Díaz, instando a la comunidad a unir esfuerzos en oración y reflexión ante esta lamentable situación.
Ante los 8 féretros blancos y decenas de personas que se dieron cita en el lugar, el obispo pidió que tras pronunciar uno a uno los nombres de los jóvenes, los asistentes respondieran «¡Vive!».
Díaz Díaz presidió la misa, en compañía de otros sacerdotes, para rogar por el eterno descanso de Bruno Jesús, Daniel, Alexis, Edwin Yael, Fernando, Juan Flavio, Juan Martín y Miguel Ángel.
«Nosotros no queremos guardar odio en el corazón. Si gritamos y exigimos justicia. Si decimos «¡Nunca Más!». Si decimos que cada persona tiene derecho a la vida y cada persona debe ser cuidada, protegida», expresó el Obispo.
